BÉLGICA

Cuando viajes a Ítaca pide que tu camino sea largo…

no apresures el viaje…

mejor que dure muchos años…”

27  de julio de 2017, jueves.  Brujas (Brugge). Bélgica

BRUJAS

Aparcamos el coche en “Parking Brugge Central Station”, Stationsplein 4, (3.50 € todo el día).

Con bus gratuito que te lleva al centro de Brujas con el ticket del parking. Salida cada 15 minutos. Es un estupendo sistema de aparcamiento que tiene Holanda para descongestionar  los centros de las ciudades. Se llama” P+R”. Se aparca en las afueras y un bus gratuito te traslada al centro.

Torre Belfort en la Grand platz.

Vamos a la oficina de turismo,VVV”, en la Grand Platz Markt, con su famosa Torre del Campanario Belfort de 83m de altura. Es la plaza del mercado, preciosa, llena de banderas y de casas pintorescas con mucho color, animada con diferentes bandas de música… disfrutamos del bullicio y la animación. 

Terminamos comiendo en “Pirata d´Or” los famosos mejillones con patatas fritas y cerveza… todo un placer!!!!





Continuamos la ruta: La Burgplatz con su arquitectura majestuosa, el Ayuntamiento una verdadera joya del S.XIV, la Basílica de la Santa Sangre,  el Palacio de Justicia.

Recorrido a través del canal.

En Blinde-Ezelst subimos a un barco para recorrer los canales más importantes, la pena es que el guía no habla español, 10€ por persona 40 minutos. Nada más empezar el trayecto, pasamos por el Muelle del Rosario, con el Campanario Belfort , desde allí observamos  uno de los rincones más bonitos de Brujas, contemplamos las dos únicas casas de madera que se conservan  y disfrutamos de los monumentos más importantes.

Al bajar, paseamos por las calles bordeando los canales que antes hemos recorrido en barco. Nos encanta callejear  y recorrer los canales al atardecer. Brujas nos parece una ciudad de cuento, con sus tejados escalonados, sus coloridas casas,  sus callejuelas con encanto…  además de  los más de 16 km de canales que la bordean!!!

Contemplamos la Eglise Notre Dame, con su torre de ladrillo, la segunda más alta del mundo, 115 m. Dentro se encuentra la “Virgen con el Niño” de Miguel Ángel. Seguimos por el  Museo Groeninge, con obras maestras de pintura flamenca, y el Hospital de San Juan. 

Lago del Amor.

Seguimos hasta Parque Minnewater, donde  se encuentra el “Lago del Amor“ oasis amurallado con un impresionante jardín interior.

Y llegamos hasta Begijnhof, donde  vivían las beguinas antiguamente, con poco turismo y mucha tranquilidad, nos sentamos en uno de  los bancos del jardín rodeados de un silencio absoluto.

Campanario Belfort.

Regresamos donde empezamos,  a la Grote Markt (o Plaza Mayor) a tomar una cerveza y disfrutar del espectáculo callejero. A nuestro lado están sentadas dos argentinas (Victoria y Anabela), hablamos con ellas y nos prometen una visita a nuestra tierra. Victoria es periodista FreeLance en Gante. Quedamos con ella en que la llamaremos para que nos sirva de guía cuando viajemos a Gante.
De regreso cogemos al bus que nos llevará hasta el parking. Excelente el sistema de transporte.

4 de agosto de 2017, viernes. Gante.

GANTE = GENT

Camino de Gante tenemos que ir despacio debido a los frecuentes desvíos por obras en la carretera. Atravesamos Amberes (Antwerpen) en medio de un gran atasco.

Moussel.

Al llegar a Gante aparcamos en un barrio de las afueras que nos inspira poca confianza. Regresamos a coger el coche y decidimos aparcar en la dirección que nos aconsejó Victoria, la periodista chilena, en la Calle Sint Margrietstraat, al lado de un hospital y muy cerca del casco antiguo.

Callejeamos hasta llegar a la plaza Vrijdagmarkt, allí nos sentamos en el “Café de París” a tomar unos moussel (mejillones) con apio. La camarera es italiana y habla español. Nos cuenta que el año que viene va a Barcelona. Es muy simpática y nos atiende genial. Nos reímos un rato con ella.

Buscamos la “VVV Gent”, recogemos mapas e información muy completa de la ciudad y por primera vez con folletos en español. Está al lado del castillo, en la antigua lonja de pescado. La zona está muy concurrida. Nos separamos un poco para poder ir a nuestro aire, más tranquilos. 

Muelles Grasley y Korenlei.

El sitio más bonito y pintoresco de la ciudad son los Muelles Graslei y Korenlei. Las calles Graslei y Korenlei recorren las dos orillas del canal y significan “muelle de las hierbas” y “muelle de los granos” respectivamente, en honor a los productos con los que se comerciaban antiguamente. Las preciosas fachadas de las casas, la torre que sobresale encima de ellas y el puente que lleva a la Iglesia de San Miguel componen una magnífica postal. Desde allí cogimos el barco para recorrer Gante a través de sus canales más importantes.

El guía habla español, es simpático y está bien documentado por lo que nos empapamos de la historia de Gante, con anécdotas curiosas sobre los edificios que veíamos desde el canal.

Al bajar callejeamos por las zonas que hemos recorrido en barco. Gante es una ciudad preciosa, rivaliza con Brujas. A mí personalmente me gusta más Gante.

Bajando desde el puente de San Miguel, desde donde se tiene una impresionante perspectiva de las llamadas “tres torres” de Gante, llegamos a la Iglesia de San Nicolás. Su aspecto exterior es impresionante, está construida en estilo gótico y destaca la utilización de piedra azul-gris. Junto a esta iglesia se encuentra el Korenmarkt, una animada plaza donde nos sentamos para tomar una cervecita.

Seguimos hasta la Torre del Campanario de Belfort, del año 1330 y con 95m de altura, es una de la más bellas de Holanda, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Alberga una colección de campanas entre las que destaca la campana Roland, con un dragón pintado en oro.

A pocos metros el Stadhuis con su impresionante fachada. 

Cerca está la Sint-Baafskathedraal, la Catedral de San Bavón. Empezó a construirse en 942 y terminó en el S. XVI combinando los estilos gótico, barroco y románico. Es célebre por haber sido el lugar donde se bautizó a Carlos I de España en el año 1500.  

En pleno centro de Gante nos sorprende el Castillo medieval de los Condes El Gravensteen, del S.XII. Allí nació Carlos I de España de improviso. El Castillo antiguamente fue la residencia de los Condes de Gante, aunque también desempeñó la función de prisión durante un tiempo. La plaza que se encuentra pegada al castillo era utilizada para realizar las ejecuciones públicas que ordenaban los condes, y en el interior de la fortaleza se puede contemplar una guillotina que forma parte de un peculiar museo de la tortura.

Muy interesantes son los Beguinajes, Gante posee dos de ellos: el   Klein Begijnhof y el Groot  Begijnhof. Están protegidos por el Patrimonio de la Humanidad, existiendo unos  12 en toda Holanda. Son lugares donde se congregaban antiguas comunidades de mujeres religiosas (las beguinas) y donde hoy en día se hace vida normal. Sin embargo, en todos se respira un mismo ambiente de paz y tranquilidad.

“ Viajar te inspira…

leer te transporta

escribir te recuerda”